Siento como si no estuviera en mi cuerpo
Desconozco a esa
persona muerta que habita en mí
Que ahoga y complica
todo mi ser
Que solo susurra frases
vacías en tinieblas
Odio sentirme tan
indefensa, tan impotente
Que ni siquiera tengo el
valor de desnudar mi alma ante nadie
Dejare de sepultar el
rostro entre mis garras apolilladas
Y asfixiare con ellas
esta anaconda de dolor que me rodea
Separando así mí
pasado del presente
Aunque digan que todo
lo que sienta bien es pecado
El único pecado para
mi es seguir siendo infeliz.
MON@
No hay comentarios:
Publicar un comentario